Ingredientes (3 unidades):
- 375 ml de nata líquida.
- 120 gr de azúcar blanco.
- 3 hojas de gelatina.
- Café.
- 50gr de azúcar
- avellanas.
Preparación:
Metemos las hojas de gelatina en agua muy fría durante 10-15 minutos. Mientras vertemos la nata en una cazuela y la calentamos. Cuando este caliente vamos incorporando el azúcar poco a poco y removemos suavemente para que se disuelva. Después echamos un chorro de café (cantidad al gusto) , si es recién hecho mejor, aunque se puede usar soluble.
Sacamos las hojas de gelatina del agua y las escurrimos bien apretándolas en la mano y las agregamos a la nata con azúcar y el café. Removemos para que se disuelva la gelatina.
Repartimos el líquido en los moldes, yo he usado ramequines. Dejamos que se atempere unos 10 minutos y ya podemos meterla al frigorífico. Como yo tenia prisa lo que hice fue tenerlos 30 minutos en el cajón del frigorífico a 0 grados y luego pasarlos otros 30 minutos mas o menos al congelador. Pero lo suyo es dejarlo 5 horas en el frigorífico.
Mientras se enfría ponemos en una sarten caliente alrededor de 50 gr de azúcar, dejamos que se haga caramelo, añadimos las avellanas y extendemos la mezcla en una bandeja de horno con papel de horno y lo dejamos enfriar.
Blog de cocina de la buena 
¡Tienen una pinta estupenda! Oye, ¿y cómo haces para que el desmoldado te quede tan genial? A mi se me pega al recipiente y siempre tengo que ayudarme con un cuchillo, con lo que el resultado no es tan aparente 😦 ¡Gracias!
Pues a mi tambien se me pega, pero voy separando un poco con los dedos por todo el perimetro y luego le doy la vuelta sobre un plato y la muevo con fuerza.
¡Muchas gracias! Lo intentaré la próxima vez! 😉
De nada! =)
Que original lo del caramelo con las avellanas! El último panna cotta que hice yo me salió incomible y eso que seguí las instrucciones de un libro… con un sabor a «lacteo con mucha grasa» horrible y además no terminó de cuajar… jaja la verdad es que no sé lo que pudo pasar… en fin… otra vez será… Saludos!