Bueno estos días he estado ausente por que he estado en Londres. Esta ha sido mi segunda visita a la capital del reino unido, y espero que sea seguida de muchas mas.

En esta ocasión he tenido la oportunidad de visitar Camden, un lugar que me ha dejado fascinado. A mi modo de ver es como un zoco occidental. El laberintico camino que se abre paso entre la multitud de tiendas te va descubriendo nuevas callejas, nuevos mundos dentro de la excéntrica, multicultural y caótica mini ciudad.

Entre tanto recoveco podemos encontrar una gran cantidad de puestos de comida rápida de varios países. En un primer vistazo puede parecer abrumadora la cantidad de comida y la diversidad que hay. Pero no hay problema, solo hay que darse un paseo y dejarse que a uno de ofrezcan comida de los puestos para probarla.

He probado la comida china, mexicana e india, pero me han faltado por probar en Camden la italiana, la turca, la nepalí, la tailandesa y los puestos de dulces. Pero el estomago de uno tiene un limite, asique las que me faltaron por probar me las dejo para la próxima.

En cuanto a la comida tengo que reconocer que me entraba mejor por los ojos.

No quiero decir que este mala, ni  mucho menos, es solo que todo tenia una pinta brutal y claro habiendo tanto entre lo que elegir… El caso es que de todo lo que pobre en general me parecíeron unos sabores suaves, yo creo que pensados para el turismo, con el picante muy rebajado, cosa que me parece una pena, pero bueno estaba bien.

De lo que mas me gusto fueron las quesadillas mexicanas con pollo y cebolla, el pollo tandori y el pollo agridulce chino. Como veis el pollo era un ingrediente omnipresente en todos los puestos y es muy curioso como cambia su preparación y sabor dependiendo de cada puesto.

En definitiva, ha sido una gran experiencia que se la recomiendo a todo el mundo.